Ser una motivada no es fácil

Si has leído el post sobre el esfuerzo estarás pensando: ¿A qué se refiere Maria? Pues te explico, el 95% de los intentos fallidos de cambios de hábitos fracasan porque llega un punto en que la motivación no es suficientemente fuerte como para renunciar a las tentaciones que se nos ponen delante. 

La motivación es una activación personal que nos lleva a hacer una cosa, nos afecta en el inicio de un cambio de hábitos, en la persistencia y el mantenimiento de este cambio y en la dirección y los objetivos que queremos conseguir. La motivación influye más allá de la conducta y tiene una gran influencia sobre nuestros pensamientos, por eso es importante estar motivado a la hora de realizar un cambio en nuestra vida. 

No vale con estar motivado, hemos de estar bien motivados, de la forma correcta. Para ello debemos encontrar una causa que nos dé fuerza para realizar el esfuerzo que nos va a suponer el cambio. 

La experiencia nos muestra que el tener un mejor cuerpo para verano o que nos quede mejor la ropa no es suficientemente fuerte para cambiar algo que llevamos haciendo 20 años. ¿Por qué queremos perder esos 10kg? ¿Por qué quieres dejar de tomar azúcar? ¿Qué quieres conseguir saliendo a correr 5 días a la semana? ¿Cuál es el motivo por el cual estás dispuesto a emplear más tiempo comprando y cocinando alimentos distintos a los que llevas toda tu vida consumiendo?

Hay mil y una motivaciones suficientemente fuertes como para hacer estos cambios, solo tienes que encontrar la tuya y ver si es suficientemente fuerte como para mantenerla en el tiempo. 

¡MOTIVATE! 

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